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  • Foto del escritorGiuliana Vomero

TIBURÓN A LA VISTA...

Actualizado: 13 jun 2023

Cada 8 junio celebramos el día del Océano y reflexionamos sobre la relación que tenemos con el océano: ¿Cuáles son los factores que nos hacen conectar o desconectarnos con el 70% del planeta tierra?, ¿Qué tipo de información recibimos para crear una percepción sobre animal o ecosistema en específico?”.

Créditos: Daniel Torobekov via Pexels


Al buscar posibles respuestas a estas preguntas, un grupo de animales controversial se me vino a la mente: los tiburones. Hace unos días mi familia me preguntaba sobre estos animales, y luego de enterarme de la última noticia sobre un tiburón azul en la costa uruguaya, me pareció una oportunidad perfecta para hablar sobre ellos desde una mirada positiva, presentándolos como los increíbles animales que son y no cómo el gran terror del océano. Los invito a desmitificar este animal y entender por qué somos afortunados de tenerlos en nuestro océano y cómo, aunque no parezca, son más vulnerables de lo que pensamos.

Comic representando dos tiburones en el agua. Uno de ellos se sorprende al ver una aleta de tiburón en el agua. Grita: Oh por Díos, un tiburón!. El segundo tiburón le recuerda a su amigo que ellos también son tiburones.

Créditos: Liz Climo


Los tiburones son peces que se encuentran en diferentes formas y tamaños. En la actualidad existen cerca de 500 especies descritas en el mundo y se distribuyen por todo el océano ya sea en aguas calientes o frías. Además, son especies migratorias y cosmopolitas, recorriendo grandes distancias que cubren distintas jurisdicciones, niveles de intervención humana y protección. Haciendo de su conservación un verdadero desafío.


Estos peces tienen un esqueleto interno formado de cartílago (el mismo material que se encuentra en las orejas de los seres humanos) lo que los diferencia de los peces que conocemos convencionalmente cuyo esqueleto es de calcio. Como dato curioso, habitan el océano desde hace 380 millones de años y están emparentados con las rayas y mantarrayas.


Tres tiburones cerca de la superficie junto a un cardúmen de peces

Créditos: Mile Ribeiro via Pexels


Definitivamente son animales pre-históricos, y seguramente se estén preguntando: ¿cómo hicieron los tiburones para no extinguirse?.


Su éxito evolutivo es gracias a diferentes características y funciones de su cuerpo que le permitieron no solo sobrevivir, si no también reproducirse y convertirse en un depredador tope en el océano. En mi opinión estas adaptaciones son verdaderas maravillas y a continuación te cuento alguna de ellas.


La visión y el olfato son sentidos que desarrollaron de forma alucinante. Además de poder identificar olores de componentes específicos que se encuentran en la sangre de los peces, los tiburones son expertos en poder visualizar su entorno a grandes profundidades cuando la luz solar ya no es visible. En su retina poseen una lámina formada por cristales, llamada Tapetum Lucidum, la cuál al recibir luz, la vuelve a reflejar para ampliar su intensidad y poder ver mejor.


Por otra parte, si hablamos de su cuerpo hidrodinámico y musculatura, esta última es verdaderamente poderosa, potenciando así sus movimientos en lo que refiere a velocidad y fuerza. Por otro lado, su mandíbula no está unida al cráneo como la nuestra. Por lo tanto, con la ayuda de sus músculos, puede dar grandes mordidas. Otro dato interesante es que sus dientes se renuevan a lo largo de su vida. Es decir, puede perderlos y volver a recuperarlos.


Tiburón blanco abriendo su boca. Se puede distinguir el gran espacio que se genera dentro de su boca y sus dientes.

Los tiburones son depredadores topes en la mayoría de los ecosistemas que habitan. Gracias a que su mandíbula no está unida al cráneo y la fuerza de sus músculos es muy potente llega a conseguir una mordida eficiente para ingerir presas grandes como lobos marinos o tortugas marinas.

Créditos: Mile Ribeiro via Pexels.


Otra de las características que más llama la atención en los tiburones es la capacidad de percibir la corriente eléctrica emitida por sus presas. ¿Impresionante o no? ¿Cómo lo hacen? Los receptores que se llaman Ampolletas de Lorenzini ubicados en su cabeza son los encargados de esta función.


De forma MUY general: los músculos de los animales, incluido los nuestros, se mueven gracias al intercambio de diferentes moléculas dentro del cuerpo. Entre ellas se encuentran las moléculas con cargas positivas y negativas (iones) que generan una corriente eléctrica al moverse dentro de los músculos. Esta corriente eléctrica, con un voltaje muy pequeño, es la que detecta un tiburón con sus ampolletas aunque su presa se encuentre escondida bajo la arena. Sí les interesa conocer más sobre este mecanismo, pueden ver el siguiente video (pueden poner subtítulos ya que está en inglés).

Dependiendo de la distancia a la que se encuentre una presa, u otro fin, el tiburón puede confiar en uno o todos sus sentidos. Por ejemplo, puede escuchar lo que está pasando a más de 1km, oler a más de una cuadra, sentir cambios de presión del agua a menos de 100 metros, su visión la utiliza cuando las presas están a menos de 100 metros, la percepción de los campos eléctricos hasta 50 cm y por último el tacto y el gusto.


Después de leer esto, no hay duda de por qué Hollywood eligió a este animal como un depredador de humanos. Pero la realidad es que sí bien su dieta es muy variada, nuestra especie no está ni cerca de su espectro de alimentación. Los tiburones pueden alimentarse de crustáceos, calamares, peces y mamíferos marinos como focas o lobos marinos, en el caso del gran tiburón blanco. Algunos científicos también creen que aquellos tiburones que viven o se alimentan en praderas de pastos marinos pueden ingerirlos y absorber nutrientes de ellos. Al ser depredadores topes, se encargan de controlar la población de sus presas y no generar desequilibrios en la cadena alimenticia. Por lo tanto, los tiburones juegan un rol muy importante en la región donde se encuentren.


Lo más impresionante es la diversidad de dietas que puede adoptar este grupo. Por ejemplo, el tiburón más grande que habita en el mundo, el Tiburón Ballena, con 14 metros de largo, se alimenta de plancton, organismos microscópicos que se encuentran en la columna de agua, como ser pequeños crustáceos o incluso huevos de otros peces.

El tiburón ballena (Rhincodon typus) es el tiburón más grande que podemos encontrar. En el 1800 fue descrito por primera vez sobre las costas de Sudáfrica. Migra y se distribuye en aguas tropicales por ejemplo en Australia, Islas Galápagos, México, Maldivas, Indonesia, Belice.

Créditos Leonardo Lamas via Pexels.


Entonces…¿por qué si los humanos no están en la dieta de un tiburón, algunas especies atacan a humanos?


No es misterio que en ciertas regiones del mundo como Hawaii, Florida – Estados Unidos, Australia, entre otros se den encuentros entre tiburones y humanos. En el 2022 se reportaron 57 casos de “ataques” de tiburones no provocados por humanos en el mundo a personas que estaban surfeando o nadando, mayoritariamente de tres especies en particular: tiburón tigre (Galeocerdo cuvier), tiburón blanco (Carcharodon carcharias) y el tiburón toro (Carcharhinus leucas).


Las causas todavía no se saben con certezas, algunos científicos proponen la teoría de la curiosidad y la exploración. Los tiburones son animales que no poseen cuidado parental, es decir, no existe una figura materna o paterna que les enseñe a cazar (como por ejemplo lo hacen las orcas o ballenas con sus crías cuando nacen). Por lo tanto, los individuos juveniles y adultos en su camino de aprendizaje, a través de la mordedura, exploran qué presas son las adecuadas para ellos. Esta teoría hace mucho sentido en los casos donde se han reportado juveniles de tiburones mordiendo a personas. Por otro lado, la teoría más antigua, todavía no probada y cuestionada por algunos científicos, es el mal interpretar la silueta de un humano en una tabla de surf por parte del tiburón como alguna de sus presas, como ser un lobo marino o una tortuga.


Independiente de cuál sea la causa, la realidad es que la probabilidad de que un humano sea mordido y muera por un tiburón en el agua es muy baja.


Ahora bien, como estos episodios existen, científicos aconsejan tener precauciones a la hora de estar en el agua si sabemos que existe la presencia de estas especies. Algunas son: nadar o surfear en grupo cerca de la costa, alejarse de la presencia de cardúmenes y salir del agua si se ven aletas de tiburones. Les comparto más consejos en este artículo, o si les interesa la temática pueden visitar el sitio web del Museo de la Universidad de Florida que contiene una base de datos muy buena sobre esta temática.


Pero, la realidad es que nosotros los humanos atacamos más a los tiburones que ellos a nosotros.

En el mundo la pesca de tiburones de forma específica y de manera incidental es una realidad. Las poblaciones de tiburones son muy suceptibles a ser sobre-explotadas por el tipo de reproducción que poseen. Estos animales llegan a la edad de reproducción más lento que otros peces (hasta 15 años en algunas especies del género Squalus, por ejemplo), no poseen un cuidado parental, y tienen un pequeño número de individuos juveniles por camada. La recuperación de la población versus aquellos individuos que son extraídos para comercializarlos es lenta y pone en riesgo su supervivencia. Por lo tanto, no son invencibles y enemigos del humano como se cree culturalmente.


Y.. ¿qué pasa en aguas uruguayas?


En Uruguay se pueden encontrar entre 50 especies de tiburones costeros y oceánicos. De hecho, Uruguay se encuentra cerca de uno de los sitios con mayor riqueza de especies de tiburones en el mundo, como es la costa atlántica de Brasil. En Uruguay existen tiburones de diversos tamaños y se pueden encontrar en aguas costeras o en océano abierto. Ejemplos de especies medianas son el gatuzo, cazón, tiburones angelitos; más grandes y oceánicas pueden ser el tiburón sarda, martillo, y el recientemente documentado en la costa de Rocha, tiburón azul. Científicos tienen la teoría que Uruguay puede ser una posible zona de cría para tiburones juveniles debido a la temperatura del agua, disponibilidad de alimento y zona protegida de depredadores.


Ejemplar de tiburón azul (Prionace glauca). Su color azul metálico en el dorso le permite camuflarse en la superficie del océano abierto. Es un gran nadador que puede realizar viajes de hasta 9000 kms. En la foto se pueden observar los receptors Ampolletas de Lorenzini sobre la cabeza, en forma de punto negro.

Créditos: Oceana.


Cambiando la narrativa hacia los tiburones.


¿Qué imagen construimos de los tiburones? ¿Por qué le tenemos miedo a una especie que muy pocas veces hemos visto en el agua? ¿Por qué le tenemos miedo a un animal que la mayoría de la población se sorprende al saber que habitan, por ejemplo, en aguas uruguayas?


La realidad es que a lo largo de los años hemos construido un imaginario sobre los tiburones a base de películas, historias de ataques fuera de lo local y miedo. Y es así como nos damos cuenta qué importante es la cultura, el conocimiento y emociones que nos llevan a experimentar diferentes conexiones con el océano y sus animales. De a poco, la narrativa hacia los tiburones se ha tornado más positiva gracias al trabajo que realizan biólogos marinos, fotógrafos, realizadores de documentales, entre otros. Por ejemplo, la organización Bite Back tiene una guía para comunicadores y medios de cómo reportar encuentros con tiburones sin fomentar una imagen de terror. La guía se puede descargar aquí.


Desde mi rol, a través del blog, lo mejor que puedo hacer es contarles hechos y características de este grupo para que puedan sorprenderse desde una mirada positiva. Transmitirles lo importante que son para el océano como reguladores de poblaciones, las increíbles características que los hicieron sobrevivir millones de años y apreciar que somos afortunados por contar con verdaderas reliquias marinas en nuestras aguas.


¡Los invito a surfear la ola y generar una narrativa positiva frente a los tiburones en sus círculos más cercanos!


A continuación, les comparto algunos materiales con los que pueden conocer a los tiburones desde otra mirada:

  1. Bucea con Sam (en inglés para niños)

2. ¿Por qué el Tiburón Ballena Visita la costa mexicana?

3. ¿Por qué los Tiburones Martillo visitan una isla en el Pacífico? (Subtítulos en español)


También pueden seguir a diferentes científicos y organizaciones en Instagram. Yo les recomiendo:

  • Melissa Cristina Marquez es científica latina que trabaja con tiburones, pueden seguir su trabajo e información sobre estos animales en Instagram.

  • Beneath the Waves es una ONG que trabaja para la conservación de tiburones, pueden seguirlos en Instagram.



Para escribir este artículo se utilizó la siguiente bibliografía:

The World of Sharks – Sharks Foundation

Shark Biology – Florida Museum

Blue Shark – Australian Museum


Clua, E. E., & Meyer, C. G. (2023). The ‘Mistaken Identity Hypothesis’ for shark bites on humans is an anthropomorphic fallacy, Behaviour (published online ahead of print 2023). doi: https://doi.org/10.1163/1568539X-bja10196


Freitas, C., Veiga, A., Sevghebian, E., Malavasi, C. (2017) Visión y Electrorecepción De Condrictios: Revisión. REDVET, Vol.18, N° 9.


Hart, N., Collin, S. (2014) Sharks Senses and Sharks Repellents. Integrative Zoology (10):1 doi: 10.1111/1749-4877.12095.


Lucifora, O., García, V., Worm, B. (2011) Global Diversity Hotspots and Conservation Priorities for Sharks. PLoS ONE 6(5): e19356. doi:10.1371/journal.pone.0019356


Midway, S.R., Wagner, T., Burgess, G.H. (2019) Trends in global shark attacks. PLoS One. 27:14(2) doi: 10.1371/journal.pone.0211049. https://www.ncbi.nlm.nih.gov/pmc/articles/PMC6392223/


Paesch, L., Domingo, A. (2003). La Pesca de Condrictios en el Uruguay. Frente Maritimo. Vol.19, Sec B: 207-216.








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